Prefiero quedarme mudo

Hace rato fui por un poco de agua caliente para prepararme un té, y ahí estaba la señora (¿o señorita?) de la limpieza que quise saludar en la mañana. Me preguntó que cómo seguía y con las manos le dije que más o menos. Ella estaba sentada doblando servilletas. Acto seguido me dice "oiga, le voy a decir algo, espero que no se ofenda", mientras yo me servía agua caliente en un vaso térmico. "¿ya está tomando algo?", yo asentí con la cabeza y le mostré unas pastillas que tenía en la bolsa de la camisa. "Porque le voy a recomendar algo buenísimo para que se le abra la garganta... son unos supositorios". "¿Qué?", pensé yo mientras sumergía el sobre del té en el agua caliente. "Sí mire, son así de chiquitos, vienen en paquetes de dos, hasta eso no salen muy caros, entre 8 y 12 pesos". "!¿Qué?!" volví a decir para mis adentros mientras la veía y asentía con la cabeza pensando obviamente en no hacerle caso. "A mí me los recomendó mi ex-jefe que es doctor, nada más que no tiene que usarlo si usa ampicilina, se los pone en la noche y al día siguiente ya está mucho mejor". "¡¡¿¿QUÉ??!!, ahora tendré que sacar esa imagen de mi mente" pensé. Luego ella para cerrar con broche de oro me dice "se llaman Aminovit B", acto seguido asiento, hago la señal de gracias con la mano y me retiro con mi té sacado de onda con su "recomendación". Vine a mi lugar y pensé "se me hace que me quiso cotorrear esta mujer", así que hice una rápida búsqueda en Google y cuál es mi sorpresa cuando veo que el dichoso Aminovit es un producto animal que venden los veterinarios para aves o equinos. Nada más eso me faltaba. Definitivamente me quedo con mis pastillas para humanos administradas de la forma tradicional, no le hace que no hable tan rápido. Si a ella le gusta meterse supositorios para caballos es muy su bronca, pero que no me chingue, prefiero quedarme mudo.